On Parole

Bienvenidos al mundo de una cuerda loca :)

jueves, 28 de marzo de 2013

Un mensaje oculto


“Hace mucho, durante la guerra fría, había un pequeño pueblo entre montañas en el que habían montado una base secreta en la que solo había un criptógrafo, Anthony. El pobre hombre había sido arrancado de su casa y se sentía fuera de lugar, pues los hombres para los que trabajaba ni siquiera le miraban. Se pasaba todo el día solo, en una habitación llena de máquinas que no dejaban de hacer ruidos y una ventana minúscula que daba aun patio gris.
Anthony, poco a poco, fue volviéndose loco y encontrando mensajes ocultos en cada quehacer cotidiano, en la disposición de la comida, en como quedaban las sábanas tras levantarse, en las gotas de lluvia…Alguien quería comunicarse con él, pero no sabía quién, hasta que un día creyó encontrar el mensaje oculto.
Por la noche, el cuartel estaba en silencio, el aire, ese día estaba tranquilo, los animalillos nocturnos habían callado y Anthony dormía, inquieto, en su catre, hasta que algo le hizo levantarse. Una voz, femenina, muy sensual, le indicaba que se levantase, que había llegado su hora.
Anthony se levantó y, siguiendo la voz, acudió a la cocina, donde cogió el cuchillo que usaba el cocinero para desollar los conejos y, en silencio, fue entrando en todas las habitaciones y matando a todos los militares, terminando también con su propia vida en el triste patio gris.
Cuando al día siguiente se descubrió lo ocurrido, encontraron un mensaje indescifrable escrito con sangre. Desde ese día, se dice que la montaña está encanta, que allí seguían las almas de militares asesinados por Anthony, buscando una respuesta a ese mensaje cifrado para poder ir al más allá…

jueves, 21 de marzo de 2013

El caminante sin nombre.


  Era un día gris, como todos los días en el pueblo en el que nunca brillaba el sol. Era por eso que todos en el lugar eran blancos, tan blancos que algunos llamaban al pueblo “Morada de Fantasmas”. Debido a la falta de luz y calor todos eran fríos e inexpresivos, en la plaza no había gritos de niños y los días de mercado eran como una procesión macabra en la que todos participaban de forma silenciosa, comprando y vendiendo sus productos sin apenas mirarse.

  Nadie visitaba nunca el pueblo, por eso la única posada estaba siempre vacía, aunque en ocasiones los vecinos se reunían en ella para beber, aunque la charla no solía ser animada, al acabar su jornada en el campo los hombres iban allí, pedían un vaso de vino y se sentaban en el lugar más apartado que pudieran encontrar, esto ayudaba a que la relación entre los vecinos fuera casi inexistente.

Pero un día más gris de lo habitual, alguien llegó al pueblo. Al principio no llamó la atención, parecía uno más del lugar pero, según fue acercándose la noche, su piel se fue volviendo cada más más traslucida, sus ojos eran negros pero vacíos e inexpresivos, llevaban la muerte escritos en ellos.

   Cuando el reloj de la iglesia, que ya nadie visitaba, marcó las diez, todo el mundo se retiró a sus casas, cerrando puertas y ventanas. El caminante siguió deambulando por el pueblo. A media noche ya los fuegos de todas las casas estaban apagados y la gente dormía acurrucada en sus duras camas, si el caminante hubiese llamado a la puerta de algún vecino solo habría oído el eco de sus golpes en la puerta…Entonces comenzaron unos llantos lastimeros y un ruido de cadenas, como si una procesión de condenados a muerte se dirigiera al patíbulo.

   Los más valientes se asomaron a las ventanas, desaparecieron dejando sólo un rastro de polvo tras ellos…Sus almas volar, volaron hacia la procesión espectral de almas encadenadas por el caminante sin nombre que había llegado a la ciudad, luchando por librarse de los grilletes que les atenazaban, buscando volver a sus casas…
MK!

miércoles, 13 de marzo de 2013

Mi etapa universitaria

Durante mi etapa universitaria aprendí mucho, en las aulas donde menos. Aprendí a besar a una chica y a ponerme el condón al mismo tiempo (una práctica necesaria y a veces pasada por alto), a beberme medio litro de cerveza de un trago sin vomitar, a ganar un dinero extra en mi tiempo libre (escribiendo los trabajos semestrales a compañeros en mejor situación económica que yo, como era el caso de la mayoría de ellos), a no apoyar al Partido Republicano pese a descender de una familia en la que esa era la tradición desde hacía muchas generaciones, a salir a las calles con una pancarta en alto gritando consignas como "Uno, dos y tres, en vuestra guerra no lucharé" y "Eh, tú, presidente, ¿a cuántos has enviado hoy a la muerte?". Aprendí que uno debe intentar colocarse en la dirección del viento cuando lanzaban gases lacrimógenos, y si no era posible, respirar despacio a través de un pañuelo o una bufanda. Aprendí que cuando aparecían las porras, convenía tenderse de costado con las piernas encogidas contra el pecho y cubrirse con las manos la parte posterior de la cabeza. En Chicago, en 1968, aprendí que la policía podía molerte a palos por bien que te cubrieras. 
Corazones en la Atlántida, S.King

giveaways


Miércoles 13 de marzo de 2013, me despierto y veo en el wasap este mensaje: "Oyes, apuntaros en el concurso de Emma que son 10 euros en libros", ¿Y a quién no motiva eso? Pues a los incultos, por que diez euros en libros en la actualidad, es un auténtico regalo del cielo, ¿Y cómo puedes lograr esto?, Pues muy sencillo, entrando en http://caminoentrelibros.blogspot.com.es/2013/03/nuevo-diseno-y-sorteo-d.html y concursando, no cuesta nada, es rápido y fácil :) 
Como bien dice mi amiga en el blog Ink Ties (blog muy recomendable, por cierto ^^), posiblemente muchos de vosotros estáis familiarizados con el término "giveaways" pero ella, y yo, no mucho, y resulta que son concursos, sorteos de toda la vida, pero a través de los blogs, ¡Cómo cambian las cosas! ¿no? Aunque en este caso, que los concursos hayan cambiado nos beneficia muy mucho :) Así que os animo a participar a todos/as.
MK!